Mamá abrazando y amamantando a su bebé de 19 meses junto a la piscina, en un día nublado, transmitiendo ternura, conexión y amor incondicional.
Un momento de pausa en el torbellino diario: abrazos, caricias y pura conexión entre mamá y su pequeño terremoto de 19 meses

🧟‍♀️ Crónica de Mamá Zombie: Un día con mi pequeño terremoto de 19 meses 💥

¿Alguna vez has sentido que tu día empieza antes de abrir los ojos? Así es como comienza mi rutina diaria con mi pequeño guerrero de 19 meses, un auténtico terremoto de energía. Si eres mamá, seguro que te sentirás identificada con este caos lleno de amor, travesuras y momentos que te roban el aliento. ¿Quieres saber cómo es un día completo con un niño pequeño lleno de energía? ¡Te lo cuento todo a continuación!

🌅 El comienzo del día: la misión de la teta

Desde que mi pequeño abre los ojos, la primera misión del día es una: la teta. No importa la hora, ni lo que mamá haya planeado, él sabe que la teta es lo que necesita para empezar el día. 🍼

Aunque estemos medio dormidos y con los ojos entrecerrados, no hay forma de evitarlo. Como una verdadera mamá zombie, ofrezco mi pecho, y en ese pequeño momento de calma, todo parece estar bien. ¿Quién necesita café cuando tienes a tu bebé pegado a la teta?

Pero claro, todo cambia una vez que ha tomado lo que necesita…

🍽️ Desayuno desastroso: el caos empieza con comida

Tras la toma, la verdadera guerra comienza. Destruir el desayuno es una misión clave. No importa si es fruta, sándwich, leche o un biberón, todo acaba en el suelo. Y mientras mamá intenta limpiar el desastre, él está ahí, «ayudando» a crear más caos, tirando el balde con agua mientras intenta limpiar la leche derramada. 💦

Es increíble cómo el desayuno se convierte en un campo de batalla, pero, de alguna manera, el desorden parece parte de la rutina. ¡Y lo mejor es que a mi pequeño le encanta!

🧑‍🍳 La cocina: explorador del caos

¡Pero eso no es todo! La siguiente parada es la cocina, un lugar donde se desatan las grandes travesuras. Mamá se descuida un segundo, y él ya está sacando todo del congelador como si fuera un pequeño explorador.

¿Y qué hace a continuación? Coge un cucharón y lo usa para tirar las papas al suelo. ¡Es su propio concierto de caos! 🎵 Y cuando se aburre de eso, sus calderos se convierten en un tambor personal, golpeándolos con toda su fuerza mientras mamá se pregunta cómo hemos llegado a este nivel de desorden. 🥄🍟

🌳 El aire libre: energía infinita para el caos

Después de su pequeña (y constante) serie de traviesas aventuras en la cocina, llega el momento de salir al aire libre. El aire fresco lo recarga de energía, ¡y es como si hubiera recibido una dosis de superpoderes!

Saltos, risas, y caos a su alrededor: la casa está desordenada, los cojines caen al suelo, y todo lo que tiene color es un lienzo perfecto para su obra de arte personal. Marcadores, pinturas, objetos brillantes son sus herramientas para crear una obra maestra en cualquier superficie disponible. Y claro, paredes, suelo y muebles se convierten en su canvas personal. ¡Todo es un juego para él! 🎨


🏃‍♂️ Sigue la fiesta: correr y saltar sin parar

Lo bueno es que el caos nunca para. Tras la explosión de energía al aire libre, llega el momento de molestar a su hermana y tirar todos los juguetes al suelo. Correr y saltar se convierte en su actividad favorita. Siempre hay algo que descubrir, algo que desordenar. ¡Es como vivir en un juego de aventuras, sin descanso!


💖 El llanto de mamá: un descanso en medio del caos

Pero, claro, en medio de todo este torbellino, hay un momento imperdible. Después de correr, saltar y hacer el caos a su alrededor, lo que más quiere es estar cerca de mamá. Y ahí estoy yo, agotada, pero feliz, porque en esos momentos de ternura, mi corazón se llena de amor. Mamá, mamá, mamá es su grito de guerra cuando se cansa del mundo, y eso me recuerda lo afortunada que soy de vivir todo esto con él. 💖


🌙 El final del día: la última toma de teta

Finalmente, cuando cae la noche y mi guerrero se acurruca junto a mí para su última toma de teta, todo lo que pasó en el día queda atrás. A pesar de estar agotada, mi corazón late con fuerza, porque sé que mi pequeño guerrero está listo para otro día de aventuras al día siguiente.


¿Te ha pasado algo similar con tu hijo? La maternidad está llena de momentos de caos, pero también de amor puro y desbordante. Si te has sentido identificada, no estás sola. ¡Te entiendo perfectamente, mamá zombie! 😅


💬 Comparte tu historia

Si tienes un pequeño terremoto en casa o alguna travesura divertida que quieras contar, ¡me encantaría saberlo! Deja un comentario y cuéntame tus momentos más divertidos de la maternidad.

🔔 ¿Te atreves a ver la maternidad sin filtros, con caos, abrazos y alguna que otra carcajada zombie?
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